Así el nuevo Tech Center de Schunk eleva el estándar de servicio para Latinoamérica

Schunk ha inaugurado una nueva instalación en Querétaro, México, para satisfacer la creciente demanda industrial en la región, esta incluye capacidades de montaje y fabricación de los componentes y aplicaciones, así como capacidades de ingeniería en el centro de aplicaciones CoLab  para automatización y depanelado.

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La reciente apertura del nuevo centro tecnológico de Schunk en Querétaro representa un hito clave en su estrategia de expansión en México y Latinoamérica. Ubicada en el Parque Tecnológico de Innovación de Querétaro, la planta cuenta con un moderno edificio de tres niveles y una amplia nave industrial, fortaleciendo sus capacidades de producción y ensamblaje. Con una inversión de aproximadamente 120 millones de pesos, esta instalación, que abarca cerca de 10,000 m², ha generado alrededor de 250 empleos, consolidando su presencia en la región.

El Centro Tecnológico no solo se enfoca en la venta de componentes, sino que busca ofrecer soluciones integrales, incluyendo diseño, programación y optimización de procesos. Esto permitirá a los clientes tener confianza en que un solo proveedor puede entregar una solución completa, desde la prospección hasta la instalación final. 

Durante la inauguración, se exhibieron más de 80 productos y 24 máquinas en funcionamiento, lo que demuestra la capacidad de producción y la tecnología avanzada que estarán disponibles para los clientes.

Acompañamiento en el proceso de incorporación a la automatización

La instalación cuenta con un laboratorio colaborativo, conocido como CoLab, y centros de aplicaciones robóticas de Schunk, donde los clientes pueden realizar pruebas y validar sus aplicaciones antes de hacer inversiones significativas. Este proceso de validación es fundamental para determinar la viabilidad de una aplicación y se lleva a cabo en varios pasos clave, según explica Rodolfo Diego Arango, especialista de Schunk:

• Validación previa a la inversión: Desde la etapa de prospección, se realizan estudios para evaluar la viabilidad de la aplicación, incluyendo un análisis del retorno de inversión. Este análisis considera factores como tiempos muertos y mejoras en los procesos de manufactura.
• Pruebas de funcionamiento: Los clientes tienen la oportunidad de probar sus aplicaciones en máquinas en funcionamiento, verificando que estas cumplan con sus necesidades específicas. Esto les permite ajustar y optimizar las aplicaciones antes de realizar una inversión importante.
• Desarrollo en tiempos óptimos: Para aplicaciones estándar, el tiempo estimado para obtener datos de viabilidad es de aproximadamente una semana. En el caso de aplicaciones más complejas, el proceso puede demorar un poco más, pero siempre con un enfoque ágil y orientado a resultados.
• Prototipado y ajustes: Durante el proceso de validación, se pueden desarrollar prototipos y realizar ajustes en el diseño, asegurando que el producto final esté completamente optimizado para su uso específico.

En el CoLab, los expertos evalúan las oportunidades de automatización para los clientes, validan su viabilidad y aseguran un mayor nivel de confianza en las inversiones. Este enfoque también facilita significativamente el proceso de incorporación a la automatización.

“Nuestro CoLab es extremadamente flexible; podemos adaptarlo o expandirlo según las necesidades específicas de nuestros clientes. Actualmente, contamos con tres máquinas de cinco ejes en diferentes tamaños: pequeño, mediano y grande, con una capacidad de hasta 800 mm. También disponemos de más de cinco máquinas de tres ejes para maquinado, además de tornos con control numérico, lo que nos permite ofrecer soluciones de alta precisión y eficiencia”, señala Rodolfo Diego.

El CoLab ha estado operando durante más de dos años en la oficina de Pirineos, aunque comenzó en instalaciones más pequeñas. El plan futuro es integrar completamente el CoLab, junto con las áreas de sujeción (work holding) y depanelado, en este nuevo centro tecnológico. En este espacio, todos los departamentos trabajarán en conjunto, apoyados por los recursos y máquinas del Tech Center para maximizar la eficiencia en las operaciones.

Sectores Estratégicos

La industria automotriz sigue siendo el principal segmento de aplicaciones de Shunck, pero también se están explorando oportunidades en sectores como el aeroespacial, la electromovilidad y la industria energética, destaca el especialista. 

La apertura del centro tecnológico de Shunck en Querétaro representa una inversión estratégica en el mercado mexicano y latinoamericano, ofreciendo capacidades avanzadas y soluciones integrales que beneficiarán a diversas industrias. Con un enfoque en la innovación y la colaboración, la compañía está bien posicionada para liderar en el desarrollo de tecnologías que impulsen la automatización y la eficiencia en la manufactura.

México se ha convertido en un destino clave para inversiones en sectores estratégicos como el automotriz y el electrónico. Varias empresas internacionales están ampliando sus operaciones o planean hacerlo en el país. Schunk está listo para respaldar esta expansión ofreciendo tecnología de producción avanzada que optimiza la eficiencia, junto con su experiencia en ingeniería y asesoramiento especializado para apoyar el crecimiento industrial en la región.